El gran viaje del «Meche»

El día sábado 21 de abril, cuando estábamos en la ceremonia de despedida del Portaescalas Renault PG60, el relator nombró aquel mítico portaescalas «Meche» del año 1957, que ahora sirve en Linares, y todos recordaron con nostalgia grandes jornadas con aquel carro. Fue en ese momento que se escuchó una antigua sirena venir desde Av. Irarrázaval, todos los presentes se preguntaron de que se trataba, y aparece el Meche para asombro de los presentes. Todos quienes llevan el «2» en el corazón derramaron lágrimas por la emotividad del momento. Aún más, un voluntario vestido como Bombero de mediado de siglo, se baja del carro y rinde cuenta al Capitán de Compañía.

El Meche, venía por un motivo en especial, acompañaría al Portaescalas Q-2 en su último llamado en nuestra Compañía, el llamado de despedida. Ambas unidades, símbolos de la historia segundina, se marcharon por Antonio Varas tal como un lejano 1984 cuando el mítico Meche se retiró del servicio Ñuñoino. Aquí relatamos el viaje desde Linares hasta Ñuñoa de esta joya del mundo automotriz.

El año 1957 entraba en servicio a nuestra Compañía un Portaescalas Mercedes Benz del año, fabricado especialmente para los requerimientos técnicos del Cuerpo de Bomberos de Ñuñoa. Un año antes el Comandante Sr.Enrique Guerra Bagolini viajó en barco a Alemania para ver el proceso de construcción y afinar detalles. Se trataba del primer portaescalas con escalas de aluminio, con escalas por «juego»(duo de escalas) y que para la época fue un gran adelante técnico.

Este carro dejó de prestar servicios en 1984, cuando fue reemplazado por el carro Portaescalas Renault-Camiva PG60. Entre 1957 y 1984 le tocó la triste experiencia de ver caer a nuestros 4 mártires, así como asistir a grandes incendios y otras emergencias. Fue un carro muy querido por la comunidad bomberil, tanto por la particularidad técnica misma del carro, así como su elegante diseño. Desde 1984 a 2003 se mantuvo en el Cuerpo de Bomberos de Ñuñoa sin prestar servicios.

        

 Es así como el año 2004 es donado al Cuerpo de Bomberos de Linares, para seguir batallando y prestando servicios. Ahí lo han cobijado como uno más de ellos, cuidándolo y manteniendolo operativo con sus cincuentenarias escalas. Ahora, en el contexto de la despedida y puesta en servicio del nuevo carro se inició a la titánica tarea de traer el Meche a la despedida, a ver a sus antiguos cófrades y a visitar ese cuartel que lo vio nacer. Luego de las consultas protocolares correspondientes, enviamos a nuestro Ayudante Sr. Rodrigo Castro y al Voluntario Alejandro Gutiérrez a la bella ciudad de Linares para acompañar a 2 gentiles voluntarios de Linares quienes traían el carro.

        

A las 7AM del sábado 21 de abril, el Meche emprendía rumbo a Santiago escribiendo otra inolvidable página en la historia de nuestra Compañía, con una espesa niebla y con sus constantes 80km/h. Los llamados telefónicos ¿Donde vienen?¿Está todo bien? se repetían hora tras hora, hasta que el azar nos jugó una mala pasada y se pinchó un neumático. Como fuerzas no faltaban, raudos se dirigieron a una vulcanización para seguir el trayecto. Durante el camino la gente los saludaba, les tomaba fotos, incluso les ofrecieron cambiarlo por otro vehículo. Sin duda este vehículo «Old School» la tiene bien ganada.

        

        

Ya en Santiago, y para no contar la sorpresa, el carro fue aparcado en cuartel 5a. Cia. con la gentil colaboración de dicha unidad. Ahí fue preparado para la ceremonia de la noche y fue visitado por los segundinos que esperaban con ansias la noche para mostrarlo a sus compañeros.

     

En la noche para la despedida y puesta en servicio de los portaescalas, fue uno de los grandes protagonistas. Llegó con la clásica sirena cincuentenaria y de él bajo un bombero vestido como en aquellos tiempos en que el carro prestaba servicios en Ñuñoa. Muchos ojos rojos de profunda emoción fue posible ver entre los segundinos y público presente. Como no, como no iba a estar junto a sus 2 sucesores en aquel cuartel de Antonio Varas para marcar un hito en la historia del bomberismo nacional, 3 generaciones de portaescalas de una misma Compañía juntos.

Desde este sitio web queremos dar un gran saludo al distinguido Cuerpo de Bomberos de Linares, fuimos testigo del cuidado a nuestro ex-Portaescalas «Meche». Además agradecemos su gesto de camaradería al traer esta unidad a nuestra casa, es un valor inagotable y muestra del mejor espíritu bomberil. Muchas gracias cófrades de Linares y por supuesto a aquellos 2 anónimos voluntarios de esa institución que acompañaron este gran viaje.

        

Querido Meche nunca olvidaremos tu visita.

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