Este es el primer año de aniversario después de los 50 años celebrados en 2019. Es decir, la Brigada Juvenil “Jorge Batiste Aleu” empieza a caminar hacia su centenario. Un sueño inmenso. Como el sueño de quienes aquel sábado 2 de agosto de 1969 fundaron la Brigada esperanzados en llegar a varias décadas de existencia, lo que se materializó gracias al esfuerzo denodado de la Segunda Compañía de Bomberos de Ñuñoa, “La Vida por la Humanidad”, y de varios cientos de muchachos que pasaron por la filas de la “Jorge Batiste Aleu”. La Brigada de la Segunda es de las fundadoras junto a las de la Quinta y Séptima Compañías del Cuerpo de Bomberos de Ñuñoa.
Se creó después de un profundo y en ocasiones acalorado debate dentro de la Segunda Compañía. La idea inicial era integrar a hijos, nietos, sobrinos de los Voluntarios y muchachada del barrio cercano a la casa segundina en Antonio Varas. Y que ellos recibieran los valores y las técnicas bomberiles para entrar mejor preparados a la Institución y servir a la comunidad.
Cuando se creó la Brigada era Director de la Compañía don Ricardo Seyler y Capitán don Manuel Fuentes. Se le asignó la desafiante tarea de conducir los primeros pasos al Voluntario Francisco Donoso, el primer Instructor Jefe. Se eligió la primera Oficialidad de Brigada, y el primer Capitán fue Antonio Celedón, hijo del destacado segundino, Víctor Celedón. El primer cuartel fue una modesta casita de madera instalada en el patio posterior del Cuartel, con su mobiliario básico, casilleros, cuadros, bancas, y que se convertiría en un espacio de conversación, humoradas y dinámica juvenil.
Cuando se habló de la creación de la Brigada, la propuesta de que llevara el nombre del más joven de los Mártires del Cuerpo de Bomberos de Ñuñoa y de la Segunda Compañía, no resistió dudas. Así, pasó a denominarse “Jorge Batiste Aleu”.
Don Manuel Oyanedel, Bombero Insigne, creó el lema de la Brigada: “Crecer y Servir”. Una síntesis del más sagrado de su propósito: hacer crecer a jóvenes novatos para que terminaran sirviendo como Bomberos Voluntarios. Ese lema y el nombre de Jorge Batiste Aleu se llevó digno en el primer estandarte de la Brigada y en el escudo original diseñado entre 1969 y 1970, el cual fue recuperado al cumplirse cincuenta años de esta unidad juvenil.
Los primeros uniformes llevan a la nostalgia y el cariño por unas cotonas negras de tosco material, botones de bronces amarrados con alambre, cascos bomberiles frágiles pero hermosos con su número 2, la tradicional toalla blanca, los infaltables calcetines negros y los bototos de aquellos años. Era casi un lujo usar guantes de trabajo.
Junto a los Ejercicios, Sesiones, Academias Teóricas, Juntas de Oficiales y Consejos de Disciplina, los brigadieres compartían inolvidables, alegres y significativos momentos y anécdotas con los Guardianes Nocturnos y los Voluntarios en aquellos ejercicios de domingo temprano, disfrutaban de tertulias y conversaciones con los viejos en ese casino de madera y acogedor, salían raudos a los Incendios en que en ocasiones ayudaban a ordenar el material, y vivieron momentos intensos y emotivos como cuando a la Brigada Juvenil le correspondió formar junto a su Compañía, en el Funeral del Mártir Jorge Dzazópulos Elgueta.
Los muchachos que comenzaron los primeros pasos de la brigada Juvenil a fines de los sesenta, abrieron camino a las siguientes cinco décadas donde decenas fueron aprendiendo la técnica, colocándose al día en la tecnología y las nuevas especialidades de la Segunda, y mostrando destreza en la madre motivadora de esta Compañía: el trabajo de escalas. Muchas veces ganando en velocidad, agilidad y armado a los mismos Voluntarios adultos. Pero también aprendieron de historia, de ética, de valores, de normativas, a sabiendas que el objetivo es llegar a ser un Bombero Integral, propio de una Institución que se forjó en dos pilares: la técnica y los valores.
En 2017 se produjo un hecho trascendente para la Brigada Juvenil, al autorizarse la incorporación de muchachas. A los dos años, por primera vez una mujer sería Capitán de la “Jorge Batiste Aleu”.
Muestra de su desarrollo y caminar constante, este 2 de agosto de 2020, la Brigada Juvenil “Jorge Batiste Aleu” cumple 51 años de existencia. Una ya innegable mayoría de edad. Sus integrantes asimilan la nueva tecnología y la historia y la ética de su Institución. Es un semillero, como lo ha sido por más de cinco décadas, de Oficiales Generales, Oficiales de Comandancia, Oficiales de Compañías y de Bomberos Voluntarios. Es espacio de una juventud vigorosa y de valores.
Escrito por Voluntario Hugo Guzmán, ex Capitán de la Brigada y ex Instructor Jefe.
Add a Comment