Era la noche del 30 de noviembre de 1998, y la Sala de Sesiones de la Segunda Compañía de Ñuñoa lucía iluminada, con asistencia de 58 Oficiales y Voluntarios. Era una Sesión presidida por el entonces Director, Waldo López Belmar, que marcaría un hito en la historia de la Segunda y también del Cuerpo de Bomberos de Ñuñoa. Este 30 de noviembre de 2018, se cumplen 20 años de aquel episodio.
En aquella ocasión, por primera vez, fueron aceptadas Solicitudes de Admisión de mujeres para ingresar a la Institución. Así, se incorporaron a las filas bomberiles de la Segunda Compañía, Úrsula Eggers Gutiérrez, María Paz Campos Vásquez y Alicia Guerra Fernández.
La primera fue inscrita con el Registro del Cuerpo 3835 y Registro de Compañía 670; la segunda, con el registro 3836 del CBÑ y 671 de la Segunda; y la tercera, Registro del Cuerpo 3837 y de Compañía 672. Eggers ingresó con 56 votos a favor, Campos con 52 votos a favor y Guerra con 48 votos a favor. La primera de las Voluntarias fue patrocinada por los Voluntarios Francisco Guerra y Héctor Moncada; la segunda de las Voluntarias fue patrocinada por los Voluntarios Iván Arriet y Luis Godoy; la tercera de las Voluntarias en ingresar, fue patrocinada por el Voluntario Honorario, ex Comandante y ex Director de la Compañía, Enrique Guerra (quien era su abuelo) y por el Voluntario Esteban Gascón.
En aquella oportunidad, precisamente, tomó la palabra el Voluntario Gascón y señaló la relevancia de que se produjera el ingreso de las primeras Voluntarias y que ello constituía un momento histórico para la Compañía y para el Cuerpo. El Voluntario Cristian Miranda llamó a apoyar a las Voluntarias una vez ingresadas. En la Sesión, el entonces Teniente 1º, Bruno Aliste, quien era el Instructor Jefe del Curso de Aspirante que por primera vez había incluido mujeres, exhibió un video en el cual se pudo comprobar y ratificar el buen desempeño de las tres aspirantes que habían expresado su intención de convertirse en Bomberas.
Aquel 30 de noviembre hubo congratulaciones, abrazos, reconocimientos y la convicción de que se daba un paso en inclusión y en hacer historia.
Una historia que había comenzado unos siete meses antes. También en Sesión de Compañía, del 8 de mayo de 1998, el Voluntario Hugo Guzmán señaló que la Junta Nacional de Cuerpos de Bomberos de Chile, había emitido un texto en el cual se establecía que no había impedimento alguno para que mujeres ingresaran a las instituciones bomberiles y que, por lo demás, era un derecho establecido constitucionalmente y no negado en reglamentos o estatutos de Compañías y Cuerpos. Junto a eso, indicó que para el Curso de Aspirantes que se iniciaba, había solicitudes de mujeres y que había que tomar una decisión. Asimismo, el Voluntario Guzmán recordó que otros Cuerpos de Bomberos ya contaban con personal femenino, que ello no había constituido problema. Por tanto, él proponía que se votara a favor del ingreso de mujeres. Sostuvo que eso marcaría un hecho histórico para la Segunda Compañía y para el Cuerpo de Bomberos de Ñuñoa que sería reconocido en el tiempo.
Finalmente fue aprobado el ingreso de mujeres a la Segunda Compañía, y desde esa fecha hasta hoy, en las filas segundinas ha formado de manera permanente personal femenino.
La historia tuvo otros cursos de acción. En Sesión Ordinaria del Directorio del Cuerpo de Bomberos de Ñuñoa, de fecha 8 de julio de 1998, se colocó en Tabla el asunto de “ingreso de personal femenino”, que comenzó a ser tratado con una nota hecha llegar por la Segunda Compañía al Directorio, donde se expresaron consideraciones legales, históricas, estructurales y sociales, para respaldar que mujeres pudiesen estar en el Cuerpo. Así también se produjo la entrega de un informe por parte del entonces Superintendente, Milton Rozas Sarfaty, en cuanto a la incorporación de mujeres.
En la oportunidad se produjo un serio y consistente debate e intercambio de opiniones respecto a esta situación, y finalmente por mayoría, el Directorio aprobó la no prohibición del ingreso de personal femenino, que las Compañías eran soberanas respecto al ingreso y que las mujeres entraban con igualdad en deberes y atribuciones establecidas en Estatutos y Reglamentos. Hay que decir que en la ocasión se contó con el respaldo decidido y entusiasta del Director Honorario, Octavio Hinzpeter Blumsak, ex Superintendente del Cuerpo de Bomberos de Ñuñoa y en ese momento, Presidente de la Junta Nacional de Bomberos.
Han pasado dos décadas y varias Compañías del Cuerpo de Bomberos de Ñuñoa tienen entre sus integrantes un contingente femenino. Las Voluntarias, al igual que los Voluntarios, han demostrado capacidades y compromisos en el desarrollo institucional y en los Actos del Servicio. Se cumplen 20 años de una decisión determinante y que significó un hito institucional.
Vol. Hugo Guzmán Rambaldi.